Sánchez se ha caído con todo el «equipo»

No son ni dos ni tres los votantes socialistas, que conozco, que han renunciado a seguir votando al Psoe.

No sólo han decidido no votar al PSOE, sino que hablan pestes de Pedro Sánchez, con más agresividad que muchos de los votantes en la oposición. Yo, he defendido en alguna ocasión que me parecía un tipo listo.

Pero no es esto de lo que quiero escribir hoy. De esto ya se ha dicho y repetido  casi todo. Lo que pretendo resaltar es una faceta de Pedro Sanchez que me llama mucho la atención.

No me explico, o mejor dicho, no comprendo,  como un tipo, al que yo consideraba listo, puede rodearse de una banda de inútiles que le van a llevar, cuando menos, ante los tribunales.

Quizá la explicación, mas que encontrarla en la necesidad de protección del Presidente, habría que buscarla en la soberbia del individuo.

Probablemente Pedro Sánchez piensa que con su habilidad y su listeza le sobra para enfrentarse a cualquier obstáculo que se le ponga en el camino, incluida la acusación de determinados delitos. Supongo que no ve necesario rodearse de gente lista, que le vale, con que cuatro mangantes sigan, como borregos, al pie de la letra lo que les manda.

Lo de rodearse de Abalos, Cerdán Leire, etc., incluso Bolaños y Pumpido obedece a las mismas razones. Forman parte del equipaje de su proyecto para derrotar a Rajoy, embaucar al socialismo y perpetrar los mayores desaguisados nacionales. O sea, convertir a España en una República, a costa de lo que sea, y mantenerse en el poder a cualquier precio.

La cuestión la enfocaba muy bien Inda, el otro día, en su articulo en la Razón. Los adláteres de Sanchez no valen ni lo que se gastaron en bautizarles, si es que lo están. Yo me pregunto como un tipo como Sánchez, capaz de los mayores atrevimientos puede confiar en esos inútiles.

Por cuestiones de prisas dejé el articulo el otro dia en este párrafo y resulta que cuando voy a continuar me aparece la comparecencia de la señora Leire y me ratifica lo que pensaba.

La comparecencia Leire Diez es muy reveladora. Refleja que la fontanera se ha asustado, y como demuestra ser poco inteligente, ha salido con una argumentación que es difícil de creer. Por mucho que se empeñe, su argumento tiene mas de montaje que de investigación.

Para mi, lo mas importante de la comparecencia, es la brecha que ha abierto en el relato. No está claro qué investigaba y con qué fin. Al pretender alejarse de su relación con el PSOE y desdibujar su relación con el Gobierno ha generado es una sucesión de incógnitas que apuntan a Pedro Sánchez.

La pregunta es bien sencilla. ¿A quien beneficiaban todas las investigaciones que pretendía la señora Leire? Pues eso…. a Pedro Sánchez. Le veo fuera del burladero sin capote, en plena feria de San Isidro.

O acaso la señora Leire , militante socialista, pretendía descubrir los entresijos fraudulentos del gobierno de Sánchez.

Conforme vamos conociendo detalles de la trama el nivel de asombro va en aumento. Resulta que hay un empresario, un tal Javier Pérez Dolset, que lleva investigando mas de 8 años a algunos jueces porque le condenaron por turbios negocios.. Al parecer su móvil es recopilar información sobre alguno de ellos con fines espurios.

Mira por donde este interés por conocer cosas criticables de los jueces coincide con interés de la señora Leire en su investigación de las cloacas del Estado y se ponen de acuerdo para investigar conjuntamente. Y ambos intereses, que casualidad, podían ser útiles para el propósito de salvaguardia de Pedro Sánchez. No me creo que Cerdán desconociera estos planes con lo que le gusta viajar en citroen.

Resumiendo. Un empresario dolido y una militante socialista obediente se confabulan para seguir investigando y escribir un libro. No se si estoy siguiendo bien el razonamiento.

La supuesta alegría de los investigadores por haber encontrado el chollo del argumentario de su novela era, además, un paliativo de la angustia de Pedro Sánchez. Por tanto no hay dejar volar la imaginación para comprender la posible «join venture» y que el Presidente hiciera la vista gorda ante la posibilidad de abrir en canal las instituciones y lo que hiciera falta, para salvar su pellejo y el de sus familiares.

Aquí aparece mi desilusión. Yo he defendido que Sánchez era un tipo más malo que inteligente, pero listo al fin y al cabo, pero con estos datos debo confesar que es un imbécil.

Como tiene que estar de acojonado para confiar en que esta banda podía sacarle del atolladero. Ahora si, ahora por mucho que Bolaños y Conde Pumpido estén dispuestos a echar tierra encima de la corrupción, creo que no le salvará ni el Tito, como dicen en mi barrio.

Lo normal es que un tipo como Sánchez, y los que le rodean, tengan un juicio justo y merecido y una condena acorde a los delitos cometidos.

Si no fuera así tendríamos que revisar nuestro Estado de Derecho.

Esta entrada fue publicada en POLITICA. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.